Un botón que no funciona, un carro de la compra que se vacía durante el proceso de pedido, la imposibilidad de acceder a la propia cuenta: no hace falta mucho para molestar a un usuario y hacer que quiera irse a la competencia. Esto no sólo es malo para la empresa en términos de imagen, porque le hace perder credibilidad y la confianza de sus clientes, sino que también tiene un impacto directo en la facturación. Y, a veces, algunos bichos pueden llegar a ser mucho más grandes de lo esperado y causar un verdadero revuelo, llegando incluso a ocupar los titulares de los medios de comunicación. He aquí un vistazo a los mayores fallos de 2021.
Imagina que tienes una cuenta de TikTok con miles de seguidores y una mañana entras y todos tus seguidores han desaparecido. Pánico, ¿verdad? Y eso es exactamente lo que ocurrió el 3 de mayo de 2021. TikTok encontró un error que mostraba el número incorrecto de seguidores. Algunos usuarios incluso acabaron con sus cuentas bloqueadas sin motivo, mientras que otros simplemente tuvieron problemas para acceder a la aplicación.
Por supuesto, los usuarios no esperaron para expresar su consternación en las redes sociales. Ese día, el hashtag #TikTokDown se encontró rápidamente en el Top Tweet. Afortunadamente, TikTok respondió bastante bien y el fallo se solucionó rápidamente, pero la frustración de los usuarios estaba ahí y la imagen de marca de la red social se resintió mucho. Con las pruebas automatizadas, esta situación seguramente podría haberse evitado, o al menos detectado antes de que fuera demasiado grande.
En julio de 2021, Raven Software añadió una nueva función a Call of Duty: Warzone, que permitía a los jugadores elegir y cambiar su equipamiento personalizado en el vestíbulo previo al juego. Sin embargo, los jugadores se dieron cuenta de un error después de la puesta en marcha de la función. Algunos jugadores podían entrar en las partidas ya equipados con las mejores armas y accesorios, lo que les daba una ventaja injusta sobre los demás.
La incorporación de esta nueva función también provocó un error que permitía a los jugadores suprimir el sonido de sus pasos. Raven Software no tuvo más remedio que eliminar la nueva función, prometiendo volver a activarla en cuanto se solucionara el error. Pero algo nos dice que si se hubieran hecho pruebas no regresivas, este problema no se habría producido.
Otra empresa que podría haberse beneficiado de una prueba de no regresión es nada menos que Tesla. A raíz de una actualización que tuvo lugar el 23 de octubre de 2021, la compañía automovilística recibió numerosos informes de clientes que indicaban que sus coches habían identificado falsamente amenazas de colisión frontal que provocaban la activación del sistema de frenado automático de emergencia y la detención repentina del vehículo.
Tesla ha examinado los informes y ha descubierto un error de comunicación en el software 10.3 Full-Self Driving beta. Se trata de un fallo bastante peligroso, ya que en caso de que el vehículo se detenga repentinamente, el riesgo de colisión trasera y de lesiones es mayor. El fabricante de automóviles ordenó rápidamente la retirada de los vehículos afectados (unos 12.000) y emitió una actualización independiente para resolver el fallo de software.
Cuatro horas: ese es el tiempo que la aplicación móvil y el sitio web del Servicio Nacional de Salud (NHS) de Inglaterra estuvieron fuera de servicio, impidiendo a los usuarios probar su estado de vacunación COVID. Muchos pasajeros del Reino Unido se quedaron tirados en los aeropuertos, algunos no pudieron embarcar y otros sufrieron retrasos. La avería informática sólo duró cuatro horas, pero causó una gran frustración y, lo que es más importante, muchos expertos creen que puso de manifiesto los problemas de un sistema único centralizado.
Después de TikTok, le tocó el turno a Facebook, Instagram y WhatsApp, que se estrellaron y despertaron la ira de sus usuarios el 4 de octubre. Durante toda la noche, fue imposible enviar o recibir un mensaje en estas redes sociales. Y si escribías Facebook en un buscador, la página no aparecía por ningún lado.
Según el medio estadounidense The Verge, incluso fue necesaria una intervención de emergencia en uno de los centros de datos del grupo Facebook para restablecer el servicio, lo que significa que el arreglo no pudo hacerse a distancia. Se cree que el fallo se debe a un cambio en la configuración de los routers que coordinan el tráfico entre los distintos centros de datos del grupo, lo que provocó la detención de los servicios.
¿Le gustaría saber que otras personas han podido acceder a su cuenta bancaria? ¿No? Pero eso es lo que experimentaron varios clientes de LCL el 23 de febrero de 2021. Durante una hora, unos cientos de clientes pudieron acceder a las cuentas de otros usuarios de la aplicación del banco. Podrían ver los gastos, los importes de los ahorros, las diferentes cuentas, etc. Afortunadamente, no fue posible realizar transacciones en las cuentas cuyos datos se mostraron, ni acceder a la información del titular de la cuenta, pero esto sigue siendo un incidente crítico.
¿La causa? No se trata de un ciberataque como algunos pudieron pensar, sino de un fallo técnico relacionado con una actualización de la aplicación. La aplicación móvil tuvo que ser suspendida temporalmente hasta que se corrigió el fallo. Este fallo no sólo afectó a los clientes cuyas cuentas eran accesibles, sino también a los que no pudieron realizar transacciones durante ese periodo. O cómo dañar la credibilidad de la empresa y la confianza de los usuarios...
Como hemos visto en estos distintos ejemplos, a veces basta un solo fallo para paralizar todo un sitio web o una aplicación móvil, con consecuencias desastrosas para la imagen, la reputación y la credibilidad de la empresa, pero también considerables pérdidas económicas. Si no quiere encontrarse en una de estas situaciones, debe detectar los errores antes de que los usuarios los detecten y notificarlos. Y para ello dispone de dos soluciones complementarias.
La primera es situar la calidad en el centro de su aplicación, para detectar los fallos que deben corregirse en el momento oportuno, es decir, antes de pasar a producción. La segunda es establecer pruebas automatizadas. Esto permite realizar más pruebas, con más frecuencia, y por lo tanto identificar más rápidamente los errores para corregirlos más rápidamente, incluso antes de que sus usuarios se den cuenta o tengan tiempo de quejarse.
Un fallo en la app del banco LCL, los usuarios podían acceder a las cuentas de otros clientes - Le Parisien
Apagón mundial de Facebook: ¿qué ha pasado? - Siglo Digital
Los 10 mayores errores de software y fallos tecnológicos de 2021 - Testdevlab